Apenas a dos cuadras de la Catedral de Tegucigalpa se encuentra el Barrio El Olvido, quizá el menos conocido de los antiguos barrios del centro, este barrio y su peculiar nombre tienen una historia interesante que data de principios del siglo XX.

Les compartimos un lindo artículo de Carlos Arturo Matute que fue publicado en La Tribuna y que dice…

 

Otra vez con ustedes mis fieles lectores en todo el país y allende fronteras. A los que nos escriben solicitándonos hablemos de sus barrios, vamos satisfaciendo sus inquietudes poco a poco.

Son muchos los barrios y colonias que conforman la capital. Ya hemos complacido a muchos de sus vecinos. Sumergidos en la tarea de investigación, seguimos dándoles a conocer de donde provienen o el por qué les pusieron esos nombres a las zonas en donde tal vez nacieron o transitaron su niñez y juventud.

Todo complementado con otros elementos históricos colaterales de nuestra capital.

ASÍ…

Barrio San Sebastián. Hoy Barrio “El Olvido”. Otros historiadores afirman que de los primeros barrios que existieron en la Villa de Tegucigalpa fue el San Sebastián, conocido ahora como “EL Olvido”.
Barrio San Sebastián. Hoy Barrio “El Olvido”. Otros historiadores afirman que de los primeros barrios que existieron en la Villa de Tegucigalpa fue el San Sebastián, conocido ahora como “EL Olvido”.

El Distrito Central, oficialmente denominado Municipio de Distrito Central (M.D.C.) constituye la capital de Honduras, según los Artículos 8 y 295 de la Constitución Política de Honduras.

El Distrito Central es uno de los 28 municipios que forman el departamento de Francisco Morazán. Uno de los 18 departamentos que juntos poseen los 398 municipios que conforman la República de Honduras. Su área total es de 1514 km².

El área administrativa del Distrito Central está formado por un sector urbano denominada Área Metropolitana de Tegucigalpa y Comayagüela. Dividido en 892 barrios y colonias y por un sector rural que posee 41 aldeas y 293 caseríos.

Aunque oficialmente el Municipio de Distrito Central constituye la capital del país, tradicionalmente se identifican a Tegucigalpa y Comayagüela como tal.

El municipio colinda al norte con Cedros y Talanga, al sur con los municipios de Maraita, San Buenaventura, Santa Ana y Lepaterique. Al este con Santa Lucía, San Antonio de Oriente, Valle de Ángeles y San Juan de Flores. Al oeste con los municipios de Ojojona, Lepaterique, Lamaní y San Antonio de Flores.

RECORRIDO

Otro ángulo. Solitaria calle del barrio El Olvido” en Tegucigalpa.
Otro ángulo. Solitaria calle del barrio El Olvido” en Tegucigalpa

Entre esta cantidad arriba apuntada de barrios y colonias que tenemos en esta -ancestralmente- desorganizada capital, ya hemos incluido en el recorrido y enviado a través de reportajes anteriores, el por qué se llama barrio La Leona, barrio Abajo, El Jazmín, El Bosque, Buenos Aires, La Hoya, entre otros.

Muchos de estos nombres son raros, inusuales y hasta jocosos. La mayoría son producto de la imaginación de sus pobladores. Vienen de “perras” (mentiras) contadas por viejos pobladores y que a lo largo de la historia se fueron quedando como verdaderas.

Otros nombres de barrios son en base a nombres de personajes que por su forma de ser y actuar en aquella sociedad existente, se “ganaron” su fama. Aunque los nombres reales, si es que existieron, con el tiempo y el desgaste de generación en generación, al final, terminó la historia en forma ya trastocada y desfigurada. Y así se quedó para siempre.

Aquí paremos un poquito para dar un ejemplo. Ya te habíamos trasladado que barrio La Hoya nace con la llegada de un bachiller español de nombre Rodrigo de la Joya. Se dice que era un hombre bohemio y aficionado al pleito. En otras palabras “tenía mal trago” el varón.

Legendarias. Deterioradas gradas del barrio “El Olvido”. La zona esta amurallada con portones como en otros sectores de la ciudad, ante la inseguridad que vivimos.
Legendarias. Deterioradas gradas del barrio “El Olvido”. La zona esta amurallada con portones como en otros sectores de la ciudad, ante la inseguridad que vivimos.

Se cuenta que en sus constantes borracheras protagonizaba escándalos que alteraban la paz de la zona. Se hizo famoso. De ahí nace la leyenda que cuando los vecinos se referían al sector lo llamaban “el de la Joya” (refiriéndose al personaje en mención).

Así, con el tiempo nace en 1590 lo que hoy se conoce, no como barrio La Joya…sino barrio La Hoya.

OTROS

Otra gran mayoría provienen de alguna circunstancia que en devenir de la historia y del tiempo sucedió en esa localidad y que fue traspasada a los descendientes. O de alguna festividad que ocurrió en aquellos tiempos.

Según nuestro amigo, el historiador Juan Manuel Aguilar, la creación de los barrios de Tegucigalpa tiene orígenes remotos y muchas veces sus nombres surgen de las casualidades.

Por aquí. AYER Y HOY. Calle que ayer iba hacia el barrio La Isla, parte de atrás del Instituto Central y muro de la casa de la familia Reina. Cuando los vehículos transitaban en vía contraria. Era el año de 1946. Y como está todo hoy por aquí. 2015.
Por aquí. AYER Y HOY. Calle que ayer iba hacia el barrio La Isla, parte de atrás del Instituto Central y muro de la casa de la familia Reina. Cuando los vehículos transitaban en vía contraria. Era el año de 1946. Y como está todo hoy por aquí. 2015.

“Existen relatos de “El Chiverito” en el sentido de que no era barrio, sino un lugar donde había la crianza de ese tipo de animales, una lomita, cubierta de zacate. Esto sucedió allá por los años 1950”, manifestó Aguilar.

No todos los orígenes de estos nombres pertenecen al antojo de sus pobladores. Aquí paremos otro poquito. Por ejemplo, Barrio El Bosque debe su título a que en sus inicios era un bosque tupido que según documentos, se localizaba después de la iglesia San Francisco.

De este mi querido barrio El Bosque en donde correteé mi niñez y juventud (aunque me dice mi madre que soy oriundo de barrio El Morazán) hare un reportaje especial próximamente.

Lo mismo que de los otros queridos barrios capitalinos que faltan. En los cuales contamos-sin temor a equivocarnos- de tantos fieles lectores que siguen estas líneas sábado a sábado y a los que nos debemos.

¿POR QUE EL NOMBRE DE “EL OLVIDO”?

Lo que registra la historia es un tanto escueta. Se dice que el nombre original de barrio El Olvido, era La Merced. Todo porque en esta zona estaba el convento, cementerio y la iglesia que lleva ese nombre.

Alfonso Guillen Zelaya Alger. Nació en Juticalpa en 1888 y falleció en México en 1947. Poeta, escritor y periodista. Autor de una de las obras cumbres de la literatura hondureña: “Lo esencial”. Fundador en 1931 de diario “El Pueblo” que vio sus pininos en este barrio “El olvido”. La falta de pago de los suscriptores fue otra de las causas que orilló a este medio al cierre de sus funciones.
Alfonso Guillen Zelaya Alger. Nació en Juticalpa en 1888 y falleció en México en 1947. Poeta, escritor y periodista. Autor de una de las obras cumbres de la literatura hondureña: “Lo esencial”. Fundador en 1931 de diario “El Pueblo” que vio sus pininos en este barrio “El olvido”. La falta de pago de los suscriptores fue otra de las causas que orilló a este medio al cierre de sus funciones.

“El Olvido le viene porque en el sitio había un cementerio y a las personas no les gusta vivir cerca de los cementerios”, expresó el historiador Juan Manuel Aguilar.

Otro elemento colateral investigado sobre el sector. El poeta y pensador hondureño Alfonso Guillén Zelaya fundó en 1931 su propio Diario. Fue el primer tabloide en Honduras bajo el nombre de “El Pueblo”.

Este periódico funcionó precisamente en barrio El Olvido de Tegucigalpa. Lamentablemente un año más tarde dejaría de existir debido a los conflictos políticos de la época.

Y por hoy hasta aquí. Hemos dejado otra HUELLA histórica imborrable en el pedregoso camino de nuestro ya largo trajinar.

 

 


6 Responde a “El Olvido, mejor nombre que cementerio…”

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