A solo un mes desde el hecho, hoy recordamos el Festival de Invierno, celebrado el 3 de diciembre en el Centro Histórico de Tegucigalpa. El Festival abarcó todo El Centro, un esfuerzo departe de sus mismas organizaciones, con actividades celebradas desde el Paseo Liquidámbar hasta el Barrio La Leona. Música en vivo, actividades familiares, arte, cultura, coros, nacimientos, ¡comida! Días como éstos son el primer paso en volver, a nuestro Centro adorado; días como estos comienzan la nueva narrativa de un Centro vivo, brotando con experiencias, con vivenzas, con historias que algún día le contaremos a nuestros hijos.

Hoy, empezamos con las historias. Y si no te quedó tiempo para visitar, no te preocupés: el 25 de marzo tenés otra oportunidad.

Festival de Invierno

Fernando Carías

Desde mucho tiempo atrás dejé de ver a familias enteras que buscaran El Centro como objeto de su visita exclusiva. Estos festivales hacen eso; numerosas familias completas y todos encontrando algo de su deleite, jóvenes que por primera vez lograron identificarse con un sitio que solo conocían por las experiencias de sus padres, son hoy un nuevo punto de las posibilidades de su agenda. Otra cosa que me encantó fue ver una identificación con la identidad de su ciudad, momentos de descubrimiento que se convierten en el principio de la valoración y enamoramiento con la esencia de su propio lugar.

Fotografía por Carlos Gallardo
Festival
Fotografía por David Waimín
Fotografía por Carlos Gallardo

Carlos Gallardo

Hace un par de meses se me dio la oportunidad de formar parte de un equipo; pasé tiempo allí y conocí a increíbles personas. A la hora que me pidieron asistencia en su Festival de Invierno, no dudé en decir que si. Por amistad y compromiso, pensé que iba a ser un evento pequeño, comida por aquí, un par de quince personas, concierto por allá, unos cincuenta. Pero lo que sucedió fue más allá de mis expectativas: un Parque Central lleno, los visitantes pidiendo más comida, pero esto solo en El Centro, nada de afuera. Será que volver al centro no es dos veces al año, será que volvemos un domingo por baleadas, un martes por tacos, y tal vez un domingo por sopa de garrobo. El Centro siempre está allí, solo está esperando que vuelvan.

Fotografía por Carlos Gallardo
Festival
Fotografía por David Waimín
Fotografía por Carlos Gallardo

María Teresa Agurcia

Amanecí en El Centro, un sábado de diciembre, en una vuelta de La Leona cuya ubicación exacta no conozco. Caminé hacia el Parque Central, donde las carpas apenas abrían sus cielos de marfil. Y las personas comenzaron a pasearse, a visitar, a disfrutar. Familias enteras, deleitando del día, probando la enchilada de espagueti—comienzan Los Bohemios a tocar—el arte ahoga la capital—y el sol se avecina por la montaña, y la música, los tambores, son de guitarra y dulzón de Calambre y en ese momento todo parecía perfecto y nada dolía y pensé: el festival nunca termina.

festival
Fotografía por Carlos Gallardo
Festival
Fotografía por David Waimín
Fotografía por Carlos Gallardo

Deja un Comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *