Justo cuando empezamos a pensar que se nos van a agotar las historias de nuestro pasado, nos encontramos un recuerdo que, como el de hoy, nos hace descubrir un nuevo camino hacia un hermoso momento en que nuestra Honduras brillaba por su simplicidad. Así nos lo decía el señor William Wells en su libro “Exploraciones y aventuras en Honduras”, del año 1857:

En el mercado de Tegucigalpa a veces se encuentra muy buen pescado traído del Río Grande y de alguno de sus tributarios. Hay varias especies de truchas llamadas mojarras, albures y una que se asemeja a la perca y se llama guapote.

A poco más o menos tres leguas de la ciudad hay una laguna artificial como de 400 yardas en cuadro, construida por los indios de Comayagüela para fines de irrigación. Allí fueron echados algunos peces y se multiplicaron tanto que a los pocos años, personas de Tegucigalpa iban allá para pescarlos.

Existe una superstición entre los indios y es la de que tanto la laguna como sus habitantes de escamas estaban bajo la protección de su santo patrón. Bien contra su voluntad los peces fueron cogidos y al siguiente verano vino una sequía terrible. Se envió una delegación a Tegucigalpa a pedir que se duplicara el número de peces en la laguna y se encendieron por cuenta de la ciudad cien velas, a fin de aplacar la cólera del santo. El dinero se reunió por suscripción popular y la laguna fue repoblada con los peces traídos del Río Grande en medio del regocijo de los comayagüelas.

Con tristeza recuerdo haber visto pequeños peces nadando en nuestro río, pero de eso hacen ya más años de los que quiero acordarme. Por desgracia, lo único que logra flotar en él ahora es la basura, entre otras suciedades.

 

Y ahora, Usted también lo sabe.

Foto de portada de SAP


2 Responde a “Los peces del Río Grande allá por 1857”

  1. Es interesante como este río se podría recuperar , si mas no recuerdo en mi clase de historia se decía que el río que cruza París eran incluso más sucio pero con un tratamiento especial se logró recuperar .

    Seria interesante que este rio no sólo fuera agua de bajo puentes si no un río natural capas de atraer un poco de turismo a la capital .

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