Desde hace tiempo me pregunto por qué nuestro Casco Histórico luce triste y abandonado en lo que se refiere a la pintura de sus casas y edificios. A veces, pienso que se debe a la restricción de la paleta de colores a la cual todos debemos someternos pero cada vez me doy cuenta que el problema no es tanto de eso y más bien radica en la actitud y visión de los propietarios. La evidencia la obtuve en un reciente viaje a Santa Rosa de Copán, una ciudad que es bonita y la tienen más bonita.

Los propietarios de viviendas decidieron poner bonita a Santa Rosa de Copán - Foto El Fotógrafo
Los propietarios de viviendas decidieron poner bonita a Santa Rosa de Copán – Foto de El Timbo al Tambo

Tenía como 6 años de no pasar por la Sultana de Occidente y al regresar hace unas semanas quedé fascinado.

Santa Rosa de Copán

La historia de Santa Rosa de Copán tiene mucha similitud con la de Tegucigalpa, no es propiamente una ciudad colonial y tampoco solo de la época republicana, es una mezcla de ambas y así como en nuestro Casco Histórico, de una esquina a otra usted pasa del siglo XVIII al XIX, edificios donde los obreros dejaron bellos grabados en las paredes y otras con fachadas sencillas y modestas, todo un espectáculo para quienes de detienen un momento a admirar los detalles.

Casas particulares y comercios, todos haciendo su parte

Los pobladores de Santa Rosa, después de un tiempo de no sacarle provecho a su riqueza arquitectónica, hoy han logrado entender que son ellos los que tienen que poner interés en embellecer su entorno. No se preocupan por la casa del vecino, solo por su propiedad y así y con el empuje de las fuerzas vivas de esa ciudad han logrado revivir la belleza de cada cuadra. Ellos se quejan y maldicen a las piedras de las calles porque les deterioran sus carros, pero no dejan que les pongan una capa de concreto o asfalto. Se han apropiado de lo que es suyo, su ciudad, y les gusta vivir bien.

No pintan a lo loco escondiendo detalles de sus fachadas, más bien los resaltan, ponen el ojo en el detalle y no lo dejan en manos de alguien que ni idea tiene del valor de las cosas, eso son ellos.

Es tiempo de poner bonita a Tegucigalpa

Pero por más bonita que esté Santa Rosa, y con el respeto debido para sus pobladores, no tienen edificios históricos e iglesias como las que están en el centro de Tegucigalpa, pero si ponen a alguien que conozca por primera vez ambos sitios, sin temor a equivocarme dirán que Santa Rosa es más bonita, y al rato sí, porque en ella sus pobladores se dieron cuenta de lo que tienen y dejaron de excusar su desprecio señalando otros problemas que existen. Simplemente pusieron empeño y los resultados están a la vista.

Es tiempo que cada quien haga su propio esfuerzo, con uno que comience los demás y quizá por vergüenza se vean obligados a hacer lo suyo. Ya Comayagua nos lleva mucha ventaja y Santa Rosa de Copán también, enorme por cierto.


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