Ya para cumplirse 200 años desde que Centroamérica se separó políticamente del Reino de España, la ciudad de Tegucigalpa ha recibido enormes cambios en lo que se refiere a infraestructura, un poblado que recibió muy poca inversión de parte de los españoles y que vale la pena recordar como posiblemente fue en 1821.
Hay mucha información interesante en este artículo de Histo Honduras que le invitamos a leer.
Tegucigalpa en el tiempo de la independencia
La inversión de la Corona Española en Honduras fue muy pobre si lo comparamos con lo que ellos hicieron en Guatemala y no digamos en México, de hecho si habláramos en términos actuales usando como ejemplo la Honduras de hoy, Tegucigalpa sería el México de aquellos tiempos, Guatemala quizá como Choluteca y Honduras como cualquier municipalidad de regular importancia, así de diferente era la inversión aunque en el caso de Tegucigalpa era algo injusto porque nuestra ciudad era una enorme contribuyente de la riqueza de la Corona.
El único edificio de importancia que no era de carácter religioso construido en Tegucigalpa era la Casa de Rescates o Casa de la Moneda, sitio donde se recaudaba la plata en bruto y se cambiaba por piezas del mismo mineral ya habiendo cobrado el impuesto a favor de España.
La otra inversión rescatable es el Puente Mallol, el que fuera concluido después de que la administración española dejara el poder en manos de los centroamericanos.
Por supuesto que no podemos dejar atrás una serie de edificios de carácter religioso como las iglesias Catedral, Los Dolores, La Merced, El Calvario y San Francisco, las que junto con algunos conventos que existieron en el período español son parte de los edificios históricos que sobreviven de la época colonial.
Es de resaltar que la Plaza Central existía y fue sitio donde los nuevos hondureños proclamaron ya no ser súbditos de la Corona, espacio urbano que es testigo de miles de historias desde tiempos de la Colonia hasta el día de hoy.
Lo demás del área urbana de la Tegucigalpa de 1821 lo podemos resumir en residencias, establos y edificios públicos que hoy ya no existen ya sea por deterioro natural o porque los urbanistas modernos consideraron sin valor y procedieron a destruirlos.
Lea más detalles en este enlace Histo Honduras
